Who likes to be hated? "If the world hates you, realize that it hated me first. If you belonged to the world, the world would love its own; but because you do not belong to the world, and I have chosen you out of the world, the world hates you." Jesus does not soften His message even a little bit. We are not called to be loved by the world. We are called to be loved by God and that is not the same. If the world hates us, we should not be shocked. Why? Just look at what the world did to Jesus. It crucified Him. We are not here to be popular, we are here to be holy! In fact, if we are following Christ fully, His way leads to the cross, and we will likely be very unpopular. The world likes to remain as it is... fallen. "No slave is greater than His master." If Jesus was persecuted, rejected, beaten, scourged, and crucified, then should we expect anything different. I am reminded of the line that Jesus spoke to St. Faustina when He appeared to her bloody and tortured, "As goes the Bridegroom, so goes the bride." .............................................................................................................................................................. ¿A quién le gusta ser odiado? "Si el mundo los odia, sepan que me ha odiado a mí antes que a ustedes. Si fueran del mundo, el mundo los amaría como cosa suya; pero el mundo los odia porque no son del mundo, pues al elegirlos, yo los he separado del mundo." Jesús no suaviza ni un poquito Su mensaje. No estamos llamados a ser amados por el mundo. Estamos llamados a ser amados por Dios y eso no es lo mismo. Si el mundo nos odia, no debería sorprendernos. ¿Por qué? Solo mire lo que el mundo le hizo a Jesús. Lo crucificó. ¡No estamos aquí para ser populares, estamos aquí para ser santos! De hecho, si seguimos a Cristo plenamente, Su camino nos lleva a la cruz y probablemente seremos muy impopulares. Al mundo le gusta permanecer como está ... caído. "El siervo no es superior a su señor". Si Jesús fue perseguido, rechazado, golpeado, azotado y crucificado, entonces deberíamos esperar algo diferente. Recuerdo la línea que Jesús le dijo a Santa Faustina cuando se le apareció ensangrentado y torturado: "Como va el Esposo, así va la Esposa".