St. Francis Xavier was one of the first to bring Catholicism to Japan in 16th century and by 1587 just 35 years after his death there were more than 200,000 Japanese Catholics. Religious tension began to grow and there began a time of persecution where property was destroyed, churches burned. people arrested and missionaries had to evangelize and teach in secret. Despite these efforts by 1597 there were 100,000 more converts. It was then during Feb of this same year that the 26 Catholics, Paul Miki and his companions, were martyred. Paul Miki was a native Japanese studying for the priesthood in the Jesuit order. He and 25 other companions, including some foreign missionaries, native seminarian, lay men and women, some children were all marched 600 miles to Nagasaki as a form of humiliation and tortured along the way. They were then crucified and killed with spears. While marching Paul Miki encouraged his companions to sing and pray aloud as well as preached Jesus Christ to all the onlookers. Finally hanging upon the cross, like Jesus, Paul preached one last time and forgave his tormentors. He said, “The only reason for my being killed is that I have taught the doctrine of Christ ... I thank God it is for this reason that I die. I believe that I am telling the truth before I die. ... After Christ's example, I forgive my persecutors. I do not hate them. I ask God to have pity on all, and I hope my blood will fall on my fellow men as a fruitful rain.” ............................................................................................................................................................. San Francisco Javier fue uno de los primeros en llevar el catolicismo a Japón en el siglo XVI y en 1587, apenas 35 años después de su muerte, había más de 200.000 católicos japoneses. La tensión religiosa comenzó a crecer y comenzó una época de persecución donde se destruyeron propiedades, se quemaron iglesias. las personas detenidas y los misioneros tenían que evangelizar y enseñar en secreto. A pesar de estos esfuerzos, en 1597 había 100.000 conversos más. Fue entonces durante el mes de febrero de este mismo año que los 26 católicos, Paul Miki y sus compañeros, fueron martirizados. Paul Miki era un japonés nativo que estudiaba para el sacerdocio en la orden de los jesuitas. Él y otros 25 compañeros, incluidos algunos misioneros extranjeros, seminaristas nativos, hombres y mujeres laicos, algunos niños fueron todos marchados 600 millas a Nagasaki como una forma de humillación y torturados en el camino. Luego fueron crucificados y asesinados con lanzas. Mientras marchaba, Paul Miki animó a sus compañeros a cantar y orar en voz alta, además de predicar a Jesucristo a todos los espectadores. Finalmente colgando de la cruz, como Jesús, Pablo predicó una última vez y perdonó a sus verdugos. Dijo: “La única razón por la que me mataron es porque he enseñado la doctrina de Cristo ... Doy gracias a Dios que es por esta razón que muero. Creo que digo la verdad antes de morir. ... Siguiendo el ejemplo de Cristo, perdono a mis perseguidores. Yo no los odio. Le pido a Dios que se apiade de todos, y espero que mi sangre caiga sobre mis semejantes como lluvia fecunda ”.