Archbishop Fulton Sheen once said that the role of the priest is to call people together. He should invite them to gather around him and to listen, to come close to him, but then at the last minute when they people have gotten close... it is then that a good priest steps out of the way and points to Jesus, where as a bad priest does not and stays standing in the center of attention. St. Paul in today's first reading is reminding us of this same reality. We are not followers of Paul, nor of Peter, nor of Apollos. We are followers of Christ Jesus. Be aware when we get caught up in the cult of a personality of someone other than Christ.
.............................................................................................................................................................
El arzobispo Fulton Sheen dijo una vez que el papel del sacerdote es convocar a la gente. Debe invitarlos a reunirse a su alrededor y escuchar, a acercarse a él, pero luego, en el último minuto, cuando la gente se ha acercado... es entonces cuando un buen sacerdote se hace a un lado y señala a Jesús, mientras que un mal sacerdote no lo hace y se queda de pie en el centro de atención. San Pablo, en la primera lectura de hoy, nos recuerda esta misma realidad. No somos seguidores de Pablo, ni de Pedro, ni de Apolo. Somos seguidores de Cristo Jesús. Tengamos cuidado cuando nos dejamos atrapar por el culto a una personalidad que no sea Cristo.