We have begun to read the First Letter of Peter. Yesterday we read, "Although you have not seen him you love him; even though you do not see him now yet you believe in him, you rejoice with an indescribable and glorious joy, as you attain the goal of faith, the salvation of your souls." Today Peter reminds us that Christ suffered much but that great glories came from His suffering, namely the salvation of souls. Therefore Peter concludes today's portion of his letter by telling us to prepare for suffering, to not be afraid of it, but rather to see our sufferings as simply following Christ. We are called to be holy, obedience and perseverance leads to our holiness, our salvation. This is the answer to Peter's own question in today's Gospel. He states inquisitively to Jesus. "We have given up everything and followed you." Jesus' answer simply put is that "there is no one who has given up anything for my sake and for the sake of the Gospel who will not receive eternal life in the age to come." ............................................................................................................................................................ Hemos comenzado a leer la Primera Carta de Pedro. Ayer leímos: "A Cristo Jesús no lo han visto y, sin embargo, lo aman; al creer en él ahora, sin verlo, se llenan de una alegría radiante e indescriptible, seguros de alcanzar la salvación de sus almas, que es la meta de la fe." Hoy Pedro nos recuerda que Cristo sufrió mucho pero que de su sufrimiento surgieron grandes glorias, es decir, la salvación de las almas. Por lo tanto, Pedro concluye la porción de su carta de hoy diciéndonos que nos preparemos para el sufrimiento, que no le tengamos miedo, sino que veamos nuestros sufrimientos como simplemente seguir a Cristo. Estamos llamados a ser santos, la obediencia y la perseverancia conducen a nuestra santidad, a nuestra salvación. Ésta es la respuesta a la pregunta del propio Pedro en el evangelio de hoy. Le dice inquisitivamente a Jesús. "Señor, ya ves que nosotros lo hemos dejado todo para seguirte". La respuesta de Jesús, en pocas palabras, es que "Nadie que haya dejado a algo por mí y por el Evangelio,dejará de recibiren el otro mundo, la vida eterna".