St. Monica is a reminder to me of the importance of never giving up on someone you love. Your love for God and your love for them is a powerful prayer of intercession. Monica married a pagan man who, though he was very tolerant of her practice of the Christian faith and her Christian charitable deeds, vehemently refused to permit his children to be baptized. Monica turned to the only help that she could find, prayer to God. She prayed for the conversion of her husband, her 3 children, and he mother in law who lived with them. A year before her husband died, both he and his mother converted to Christianity. After some time had passed 2 of her 3 children were baptized and eventually entered the religious life. Her third child was named Augustine and refused baptism. After 17 years of praying, arguing with him over beliefs and begging St. Ambrose to intercede, Augustine finally at the age 34 was baptized a Christian. Soon after his baptism, he had decided to go spread the Word of God in Africa where Augustine went on to become the bishop of Hippo and one of the worlds most influential theologians. He was eventually canonized and became St. Augustine. The love that motivates our prayer is precious to God. St. Monica, pray for us. ............................................................................................................................................................ Santa Mónica es un recordatorio para mí de la importancia de nunca renunciar a alguien a quien amas. Tu amor por Dios y tu amor por ellos es una poderosa oración de intercesión. Mónica se casó con un hombre pagano que, aunque era muy tolerante con su práctica de la fe cristiana y sus obras de caridad cristiana, se negó con vehemencia a permitir que sus hijos fueran bautizados. Mónica recurrió a la única ayuda que pudo encontrar, la oración a Dios. Oró por la conversión de su esposo, sus 3 hijos y la suegra que vivía con ellos. Un año antes de que muriera su marido, tanto él como su madre se convirtieron al cristianismo. Después de algún tiempo, 2 de sus 3 hijos fueron bautizados y eventualmente entraron a la vida religiosa. Su tercer hijo se llamó Agustín y rechazó el bautismo. Después de 17 años de orar, discutir con él sobre creencias y rogar a San Ambrosio que intercediera, Agustín finalmente a la edad de 34 años fue bautizado cristiano. Poco después de su bautismo, decidió ir a difundir la Palabra de Dios en África, donde Agustín se convirtió en obispo de Hipona y uno de los teólogos más influyentes del mundo. Finalmente fue canonizado y se convirtió en San Agustín. El amor que motiva nuestra oración es precioso para Dios. Santa Mónica, ruega por nosotros.